Bechamel

Bueno, hoy con esta receta, quiero plantearme un reto, terminar de una vez por todas con el mito de los grumos de la bechamel, esa que nunca hacermos porque de antemano pensamos que es muy difícil y nos va a salir fatal y entonces nos privamos de hacer unas deliciosas croquetas y es cuando vamos y las compramos congeladas (que por cierto están muy logradas .... YO TAMBIEN COMPRO CROQUETAS CONGELADAS y me encantan....)


Arrancamos ........

INGREDIENTES : - Harina de trigo
                            - Agua caliente
                            - Leche caliente
                            - Pastilla de caldo y sal.
                            - Pacienciaaaaaaaaa!!!!!!!!!!!!! 


Yo os voy a dar las medidas para dos adultos y dos niños (más o menos)
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Utilizaremos tres cucharadas de aceite de oliva, tres cucharadas soperas colmadas de harina, 100 ml de agua caliente, 300 ml de leche también caliente, un cuarto de la pastilla de caldo y sal.

En el recipiente donde la queramos hacer ponemos las tres cucharadas de aceite y dejamos que se calienten un poco, cuando veamos que está le añadimos las tres cucharadas de harina y con un tenedor amasamos bien los dos ingredientes, durante tres o cuatro minutos de forma que la harina se impregne bien del aceite (aplastamos bien con el tenedor todo el rato), cuando lo tengamos le añadimos el agua, tiene que estar caliente, pero antes de ponerlo baja el fuego y así con todo al echar el agua saltará un poco ..... antes de añadirle el agua ten preparada la varilla si la tienes (y sino utiliza el tenedor) y vete removiendo bien sin parar ... a veces se va metiendo la masa por la varilla, pues nada un par de golpes contra el borde de la cazuela y lo volveis a poner dentro..... para este paso hay que remover con fuerza (para mi es el paso más importante, pues es cuando quitamos los grumos), cuando veamos que ya tenemos una mezcla firme, sin grumos es cuando le vamos añadiendo poco a poco la leche ..... sin dejar de remover ... ahora que ya no tenemos grumos podemos ayudarnos de una cuchara de madera, le añadimos el cuarto de pastilla de carne y la sal y listo.
Yo a veces pongo a calentar la leche en un cazo con la media pastilla para que se deshaga, si la poneis directamente en la bechamel os teneis que asegurar de que se deshaga porque puede pasar que no esté deshecha y es una sorpresa muy desagradable comerte un trozo ... es pura sal....

Ahora, que ya sabeis hacerla, otro dia  os enseñaré la receta de la lasaña que es buenísima.
Espero que os parezca fácil y no dejeis de probar con estos pequeños truquillos, igual os llevais una sorpresa.......